El presidente Petro fundamentó la decisión señalando que “la lucha contra las drogas debe subordinarse a los derechos humanos del pueblo caribeño”. Al menos 75 personas han sido asesinadas a raíz de los ataques de EE.UU. en el Caribe y el Pacífico.
El presidente de Colombia, Gustavo Petro, ordenó el martes la suspensión inmediata de la colaboración de inteligencia con agencias de seguridad estadounidenses, en respuesta a los ataques contra lanchas y ejecuciones extrajudiciales en el mar Caribe y el Pacífico oriental.
La medida, anunciada en su cuenta oficial de X, establece que “se da orden a todos los niveles de la inteligencia de la fuerza pública suspender envío de comunicaciones y otros tratos con agencias de seguridad estadounidenses”, mientras persistan los bombardeos ejecutados por la Administración de Donald Trump.
Se da orden a todos los niveles de la inteligencia de la fuerza pública suspender envío de comunicaciones y otros tratos con agencias de seguridad estadounidenses. Tal medida se mantendrá mientras se mantenga el ataque con misiles a lanchas en el Caribe. La lucha contra las… https://t.co/IZRWiL4s6t
— Gustavo Petro (@petrogustavo) November 11, 2025
Estos ataques, realizados con misiles contra embarcaciones de pequeño calado, han sido calificados por expertos de la Organización de Naciones Unidas (ONU) como “ejecuciones sumarias” y contrarias al derecho humanitario. El alto comisionado de Derechos Humanos de la ONU, Volker Türk, ha condenado públicamente estas acciones.
Colombia se suma así al Reino Unido, que también suspenderá el intercambio de inteligencia con EE.UU. sobre operaciones en el Caribe, según informaron medios de comunicación. Fuentes consultadas por la CNN indicaron que Londres dejó de compartir datos para no ser considerado cómplice de operaciones que considera ilegales, tras años de colaboración en la localización de “narcolanchas” para su interceptación por la Guardia Costera estadounidense.
El Gobierno colombiano ha criticado reiteradamente la estrategia antidrogas de Washington. Gustavo Petro ha reiterado que su Gobierno prioriza el respeto a la soberanía y los derechos humanos sobre la cooperación militar en contextos que considera ilegales.
América Latina y el Caribe como Zona de Paz
Desde agosto, Estados Unidos mantiene en aguas caribeñas alrededor de ocho buques de guerra -entre ellos seis destructores-, tres buques anfibios y un submarino, en lo que expertos consideran como su mayor despliegue marítimo desde la primera guerra del golfo Pérsico (1990-1991). A esto se suma que el 24 de octubre el portaaviones Gerald Ford y su grupo de ataque fueron enviados por orden del Pentágono al área de operaciones del Comando Sur.
Los Gobiernos de Venezuela, Colombia y Cuba han rechazado el despliegue militar y han alertado de forma reiterada sobre la amenaza que representa para la región. Señalan que los ataques ejecutados bajo la justificación de enfrentar el tráfico de drogas son en realidad una política de fuerza e intimidación hacia gobiernos de la región que mantienen posiciones soberanas o contrarias a los intereses de Washington.
En este sentido, han destacado la necesidad de preservar a América Latina y el Caribe como «Zona de paz», tal como fuera proclamado en la II Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), celebrada en La Habana en 2014.
Foto: Andrea Puentes – Presidencia
Con información de TeleSur