La Paz.- El fiscal Franklin Alborta aseguró  que suman 30 los militares y civiles investigados por el fallido golpe de Estado del 26 de junio bajo el mando del ex jefe del Ejército general Juan José Zúñiga.

“Debemos hacer hincapié de manera generalizada, que es un caso bastante complejo. De manera preliminar informar que son más de 30 personas las que se encuentran ya formalmente en este proceso de investigación”, afirmó el representante del Ministerio Público.

Mencionó entre ellos al comandante del grupo de tropas especiales denominado F10 de las Fuerzas Armadas, Vladimir Lupa Salamanca.

Este oficial fue aprehendido la víspera en Cochabamba y se encuentra en celdas de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc) de La Paz, donde debe presentar su declaración informativa ante la comisión de fiscales.

Remarcó Alborta que la Fiscalía y la Policía Boliviana realizan esfuerzos para tener la mayor cantidad de elementos probatorios en la etapa de investigación. “Se está recopilando bastante información que se está procesando -sostuvo la autoridad-, se está analizando, tiene que seguir ese conducto de análisis. Oportunamente y de manera responsable también va a ser informada”.

Describió que entre los pesquisados figuran militares del servicio pasivo y activo, y un civil.

Figuras principales en este expediente son el exjefe del Ejército Juan José Zúñiga, el excomandante de la Fuerza Aérea Boliviana Marcelo Zegarra y el de la Armada Juan Arnez, entre otros.

El 26 de junio, tras enfrentar a Zúñiga en el Palacio de Gobierno y confirmar su insubordinación, el presidente Luis Arce posesionó en la Casa Grande del Pueblo (sede gubernamental) a nuevos mandos militares.

Como nuevo comandante general del Ejército nombró al general de división José Wilson, quien en su primera intervención pública ordenó el retorno a los cuarteles de todos los militares

“Haremos respetar la democracia ganada con el voto del pueblo boliviano”, expresó el mandatario.

Minutos antes de la posesión de los nuevos mandos, Zúñiga proclamó ante la prensa que el Ejército liberaría a Jeanine Áñez, Luis Fernando Camacho y otros militares golpistas de 2019, a quienes calificó de “presos políticos”.

El intento de golpe tiene como antecedente recientes acusaciones contra planes injerencistas de la embajada de Estados Unidos en Bolivia, y declaraciones de la jefa del Comando Sur, Laura Richardson, quien al referirse de manera reiterada al litio, el agua y la amazonia de Bolivia ha utilizado el verbo “tenemos”.
Con información de Prensa Latina

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