La Habana.- La vicedirectora de la Dirección General de Asuntos Consulares y Cubanos Residentes en el Exterior (Dacre) de la Cancillería de Cuba, Laura Pujol, expresó la satisfacción por el desarrollo de la IV Conferencia de la Nación y la Emigración.
En contacto con la prensa al finalizar el primer panel de la cita, dedicado a los vínculos entre Cuba y sus nacionales en el exterior, Pujol afirmó que «estamos satisfechos y consideramos que todo marcha con gran fluidez y que se produce un encuentro muy productivo».
Apuntó que se nota la necesidad del reencuentro físico, sobre todo después de más de 19 años sin realizar este tipo de conferencias.
Precisó que en esta cuarta edición participan 361 cubanos residentes en 54 países, un tercio de ellos en Estados Unidos, y con buena presencia también de connacionales que viven en España, México, Panamá, Francia e Italia.
Pujol calificó de favorable la acogida de los cubanos residentes en el exterior a recientes medidas de extensión de la validez a 10 años del pasaporte cubano y la permanencia de la moratoria de los 24 meses para la estancia en el exterior.
Ha sido un debate patriótico, donde prevaleció la defensa de los principios de soberanía, independencia y autodeterminación, de amor a la patria, subrayó la vicedirectora de la Dacre.
Señaló que varios de los oradores coincidieron en señalar al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por Estados Unidos contra Cuba, desde hace más de seis décadas, como el principal impedimento para el desarrollo del país.
En ese sentido, mencionaron además las afectaciones que causa el bloqueo de Estados Unidos en sus posibilidades de interacción con Cuba, por las dificultades que encuentran cuando van a tener actividades comerciales con la isla.
Asimismo, prosiguió, la necesidad de avanzar en el fortalecimiento de los vínculos de Cuba con sus connacionales en el exterior.
Aseguró que los cubanos en el exterior han podido plantear con total transparencia y libertad sus principales inquietudes, así como sus sentimientos patrióticos. Al respecto, comentó que se han producido momentos realmente emocionantes en varias de las intervenciones.
Tras destacar la presencia de algunos de los participantes en los diálogos de 1978, génesis de estas conferencias, Pujol resaltó que la presente cita constituye un encuentro generacional entre esos primeros cubanos que retornaron a la patria y se mantienen en diálogo permanente con la nación desde sus lugares de residencia y las nuevas generaciones de nacionales residentes en el exterior.
Por ello, consideró que hay una composición muy rica en este auditorio, en el cual existe una semblanza fidedigna de lo que es la nación cubana y como eso se refleja en la emigración cubana. «Es una composición variopinta que puede enriquecer mucho el evento», puntualizó.
Tras indicar que buena parte de los asistentes, gracias a nuevas disposiciones, además de vivir en el exterior mantienen su residencia en Cuba, Pujol sostuvo que este hecho hace que los vínculos sean más fluidos, que la conversación sea más diáfana y que haya un interés creciente por ambas partes de estrechar estos nexos en un proceso continuo e irreversible.
A la jornada inaugural asistió el presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, y el canciller Bruno Rodríguez.
Con información de Prensa Latina