Grupo de estudiantes de la universidad Javeriana, clausuró taller ambiental realizado en el corregimiento siete de Juntas y las veredas Llanitos y el Gallo, Cañón del Combeima, con duración de un año. Con diversas actividades lúdicas y pedagógicas el grupo concluyó la programación exitosamente, según indicaron las personas que participaron de la actividad en esta región.

Por Nelson Lombana Silva

La estudiante de antropología, Daniela Quintero Gutiérrez, dijo que el trabajo desarrollado tuvo como articulación fundamental el agua, el territorio y los riesgos propios de la región, con el fin de que la comunidad se empodere de éste y, precisamente, minimice dichos riesgos.

Explicó que durante un año se compartió arduamente con la comunidad, definiendo posibilidades de convivir sanamente con el medio ambiente de esta inmensa y pintoresca región, verdadera estrella hidrográfica, compuesta por el río Combeima y numerosas quebradas y riachuelos.

La actividad permitió “compartir saberes desde la academia y desde la comunidad, fundamentado en el territorio vigilado por el imponente nevado del Tolima”, señaló.

Al taller clausura, estuvieron presentes los bibliotecarios de Juntas y Villa Restrepo, señalando la importancia del taller y la necesidad de profundizar la participación de la comunidad en la preservación del territorio. Nayi Carolina Molina, destacó ampliamente el contenido del taller y la necesidad de que la comunidad se empodere de su propio desarrollo.

Por su parte, el bibliotecario del Cañón del Combeima, destacó el esfuerzo del grupo de estudiantes de la universidad Javeriana, por acercar el conocimiento científico al conocimiento empírico, en un gran esfuerzo por desarrollar el sentido de pertenencia, el medio ambiente y el desarrollo comunitario.

Particular importancia fue el hecho de que el grupo universitario dejó material propio de la región recopilado en las diversas sesiones con el propósito de darle continuidad al proceso haciendo que más comunidad entienda la importancia de la unidad, la organización y la vocación de cambio, a partir de la experiencia propia.

Mapas, juegos, memorias y documentación actualizada de la región quedaron en manos de los líderes y lideresas comunitarias que participaron de la actividad.

Para la lideresa Consuelo Cendales, de la vereda El Gallo, la programación desarrollada llenó plenamente las expectativas e instó a socializar esos conocimientos con las respectivas comunidades. “Nada habremos logrado si todo este material didáctico que nos han facilitado lo dejamos engavetados”, indicó.

Janeth Campos Sandoval, de Llanitos, expresó su gratitud por el certamen, convocando a los demás líderes y lideresas a persistir en la tarea de fomentar la formación en dirección de fortalecer la autonomía de las comunidades y la preservación del imponente cañón del Combeima.

Esta capacitación permite conocer mucho mejor el Cañón del Combeima, sus potencialidades, debilidades y riesgos. Además, fortalecer las mejores relaciones con el medio ambiente, las plantas, los animales y las distintas corrientes hídricas que bañan el extenso territorio.

 

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