Nicolás Maduro presidió una gigantesca movilización de cierre de campaña en respaldo a su postulación y a su programa de gobierno. Foto prensa presidencial de Venezuela
A pesar de los bloqueos y el sabotaje, los electores decidieron votar por el futuro, por continuar la recuperación económica y los cambios y transformaciones que Venezuela necesita
Por: Alberto Acevedo
Conocido el primer boletín del Consejo Nacional Electoral, hacia la media noche del pasado domingo 28, el organismo registró una “tendencia contundente” del veredicto de las urnas en el que el actual mandatario, Nicolás Maduro Moros, obtuvo el respaldo de cinco millones 150.092 electores, que representan el 51,20 por ciento de la votación y que lo acreditan para gobernar el país durante un período presidencial más, entre 2025 y 2031.
Elvis Amoroso, director del Consejo Nacional Electoral, quien dio a conocer el boletín, dijo que a esa hora se había contabilizado el 80 por ciento de la votación, con un nivel de participación electoral del 59 por ciento de la población.
El organismo rector electoral dijo también que en el segundo lugar se situó el candidato opositor Edmundo González, de la Mesa de Unidad, quien obtuvo cuatro millones 445.978 votos, para un total del 44,2 por ciento del registro. De diez candidatos presidenciales inscritos, los ocho restantes, sumados, obtuvieron 462.704 votos, equivalentes al 4,6 por ciento del censo de ciudadanos inscritos.
Es el triunfo de la paz
Amoroso indicó que en esta oportunidad se acreditaron 15.797 centros electorales, con 30.026 mesas de votación en todo el territorio nacional para atender a más de 21 millones de ciudadanos inscritos. En respaldo a los diez candidatos inscritos adelantaron campaña 30 partidos políticos y la jornada contó con la presencia de 1300 veedores internacionales, entre quienes se contó el presidente del Partido Comunista Colombiano, Jaime Caycedo Turriago.
Confirmados los primeros resultados, el presidente Nicolás Maduro, esa misma noche, se dirigió a un numeroso grupo de partidarios que esperaba los resultados, y dijo que el veredicto de las urnas “es el triunfo de la paz, del ideal republicano, de las ideas de igualdad… Este, comandante Hugo Chávez, es tu triunfo”, sostuvo; mención que es particularmente significativa porque el día de las elecciones fue un aniversario más del natalicio del líder bolivariano.
Maduro advirtió que, tras la jornada del domingo, habría “paz, tranquilidad y justicia” en el país, al tiempo que destacó las virtudes del sistema electoral, caracterizado por múltiples auditorías a lo largo del proceso. Pidió a terceros países “respeto a la Constitución, a los poderes públicos, a la vida soberana de Venezuela y a la voluntad popular”.
La voz del pueblo
De otra parte, Jorge Rodríguez, jefe del comando de campaña del candidato chavista, resaltó que la jornada electoral celebrada el domingo pasado “signa la derrota definitiva de sectores extremistas de Venezuela” y de los factores externos que atacan a este país suramericano.
Rodríguez dijo, durante una rueda de prensa, que a lo largo de los comicios hubo sectores antidemocráticos que intentaron realizar “actos de sabotaje” que fueron impedidos por la misma ciudadanía. “Hoy fracasó la violencia y fracasó el odio”, puntualizó. “El pueblo hoy habló y la voz del pueblo debe ser respetada”, indicó el también vocero del Partido Socialista Unido de Venezuela, PSUV.
El jefe del comando de la campaña oficialista dio las gracias a los votantes porque “a pesar de los bloqueos”, decidieron votar por “el futuro, por continuar la recuperación económica y los cambios y transformaciones que Venezuela necesita”.
A propósito de esos cambios y transformaciones, Maduro contrastó su plan de gobierno, basado en el Proyecto Nacional Simón Bolívar, suscrito por el entonces presidente Hugo Chávez, con las alternativas que presenta la oposición, particularmente el ala ultraderechista de esta.
En opinión de Maduro, la principal oferta del candidato derechista ─Edmundo González Urrutia─ consiste en regresar al país a la órbita de dominio de Estados Unidos y en la ejecución de un programa agresivo de privatizaciones en sectores clave como la educación, la salud, la vivienda, así como la suspensión de los programas sociales, según se desprende del plan de gestión en inglés (primero fue presentado al Departamento de Estado de los Estados Unidos), que se difundió en los medios y redes sociales.
Con información del Semanario Voz