Lo más granado de la poesía mundial, se concentra por estos días en la ciudad de la eterna primavera, Medellín (Colombia), en el marco del 33 Festival de poesía, intitulado en esta oportunidad: “Migración de la muerte a la vida”.
Por Nelson Lombana Silva
Es un acontecimiento cultural histórico a nivel mundial, que irá en este año del primero al quince de julio, contando con 104 poetas de 60 países, con 93 actividades, siete virtuales y 86 presenciales. Además, se realizará el primer congreso del movimiento poético mundial con la participación de 80 delegados y delegadas, entre presenciales y virtuales en Medellín y en Caracas (República Bolivariana de Venezuela), el 13 y 18 de julio, encuentro que estudiará los distintos informes, elaborará el plan para la vigencia 2023-2028 y nombrará un comité coordinador, según el semanario VOZ La verdad del pueblo, edición impresa número 3180, página 20.
Semejante suceso cultural de carácter mundial, totalmente invisibilizado por los carroñeros medios masivos de comunicación corporativos de la sucia oligarquía colombiana. Un esfuerzo descomunal de los poetas colombianos encabezados por Fernando Rendón, que llega a su trigésima tercera versión con gran expectativa y entusiasmo.
Este Festival surgió como una propuesta alternativa a la paz y en rechazo a la política terrorista de estado que vivía Colombia con suma intensidad durante las primeras ediciones de este importantísimo certamen. Hastiado el pueblo antioqueño de tanta violencia militar-paramilitar, agudizada con la seguridad democrática del narcotraficante número 82, Álvaro Uribe Vélez, proscribió la fuerza bruta de las armas, abrazando con ternura el amor impoluto del poema y la poesía.
El festival fue recibido desde un principio como un bálsamo, un oasis y una esperanza utópica de salir de esa carnicería humana estimulada por el régimen capitalista y la desalmada burguesía colombiana. El pueblo se volcó a la calle y a los parques a humanizar el alma y a soñar con la vida y la esperanza. Hombre no es el que empuña un arma para matar a un semejante de su misma condición social por ganar una sucia moneda, hombre es aquel que hace aparecer en sus labios un poema, una frase cadenciosa, animando el espíritu y llenado el entorno de vida, de unidad y solidaridad.
Este certamen fue galardonado en el 2006, recibiendo el premio Nobel Alternativo y el reconocimiento como patrimonio cultural de la nación. El Nobel de Literatura, Wole Soyinka, indicó: “Creo que Medellín es único por haber generado un público que literalmente come, bebe y tal vez duerme dentro de la poesía”.
Disfrutemos este magno evento cultural y artístico y, hagamos el milagro de volver a enamorarnos con un poema, un verso, como los escritos por Pablo Neruda, Rubén Darío o Fernando Rendón, por ejemplo. ¡La poesía es paz, esperanza y humanidad, es amor!