El pasado viernes 29 de julio radicamos ante el Concejo de Bogotá el proyecto de acuerdo 422 de 2022 “por medio del cual se establecen lineamientos para garantizar el derecho de las personas trans[1] a una vida sin violencias con plena garantía de derechos, mediante la implementación de acciones afirmativas dentro de las entidades del Distrito”. Este, como fruto del trabajo colectivo con activistas, organizaciones sociales, la Dirección de Diversidad Sexual de la Secretaría de Planeación y los concejales Luis Carlos Leal y Martín Rivera.
Por Heidy Sánchez
El proyecto de acuerdo tiene varios antecedentes que es necesario señalar, pues nace de la iniciativa de organizaciones y activistas de los sectores trans que en campamentos, mesas de trabajo y espacios de seguimiento a la Política Distrital LGBT, vieron la necesidad de concretar y diferenciar las acciones que se hacían o faltaban por desarrollar para garantizar los derechos de las personas trans y no binarias, al ser estos los sectores dentro de la población LGBT que ven más vulnerados sus derechos. Si bien este proceso puede tener un largo alcance en el tiempo gracias a los activismos históricos del movimiento, empezó a forjarse en sugerencias al Distrito de manera específica hace cinco años y se concretó en un documento que elaboró la Unidad Técnica de Apoyo (trans) de la Mesa Interinstitucional de Diversidad Sexual (MIDS) de la Política LGBT, encargada de hacer seguimiento a las acciones específicas sobre el sector.
Dicho documento fue entregado a la Bancada de la Diversidad Sexual y de Géneros del Concejo de Bogotá en el año 2021, y por iniciativa nuestra en conjunto con los concejales mencionados se propuso ajustarlo, retroalimentarlo y convertirlo en el proyecto radicado; no sin antes desarrollar espacios con la ciudadanía y recibir el apoyo de la Dirección de Diversidad Sexual, rectora de la política LGBT.
Este proyecto de acuerdo busca avanzar y concretar los derechos de las personas trans en Bogotá a partir de acciones afirmativas en diferentes aspectos. Dichas acciones se implementarán desde las entidades del Distrito, en sintonía con sus competencias en los diferentes sectores de la administración, y representarán, de ser aprobadas como Acuerdo por el Concejo, un segundo paso para la garantía de derechos a los sectores LGBT, teniendo como antecedente el Acuerdo 371 de 2009 que creó la Política Distrital, pionera en el país y que hoy sigue avanzando en la garantía de derechos.
A nivel nacional hay que decir que la situación de las personas trans es verdaderamente dramática pues, según reportes de la Defensoría del Pueblo, entre 2021 y mayo de 2022, al menos 46 personas trans fueron asesinadas. El caso bogotano también es desalentador pues se han registrado asesinatos, agresiones físicas, casos de abuso policial y múltiples barreras de acceso a derechos básicos, lo que hace necesario que de manera preventiva y reactiva la administración distrital deba aplicar acciones de protección y garantías específicas sobre este grupo poblacional.
En ese sentido, el proyecto de acuerdo se hace necesario porque establece acciones particulares que compensan las garantías generales que determina la Política LGBT del Distrito y desarrolla acciones que la política nacional LGBT no ha trabajado en los cuatro años de existencia. A propósito, hay que decir que el gobierno de Iván Duque engavetó su aplicación, mientras que por todo el territorio nacional se siguen presentando situaciones que afectan la vida y los derechos de la población trans. Así lo señala el informe de empalme que presentó la población al gobierno entrante y la veeduría de la Política Pública Nacional LGBTI que rajó en su aplicación al gobierno saliente.
Respecto al Concejo de Bogotá, cabe destacar que es una coyuntura importante para la aprobación de este proyecto, ya que le hace cumplir con su deber de orientar lineamientos, acciones y políticas tendientes a defender una población de especial protección como lo es la de las personas trans, así como lo ha hecho con otros grupos poblacionales. Igualmente, es para la Alcaldía Mayor una oportunidad de contar con directrices normativas claras sobre cómo garantizar de manera particular los derechos de la población trans.
De este modo, el proyecto pretende establecer lineamientos en materia del derecho a la vida y la seguridad para que exista enfoque diferencial y acciones que permitan garantizar la existencia vital de la población, prevenir las violencias ciudadanas y policiales, además de incluirles en las rutas de atención que tienen estos sectores de la administración. Otro derecho que se abarca es el de la educación, buscando acciones que permitan el acceso, permanencia y graduación en la básica, media y superior para personas trans, aplicando acciones específicas que garanticen esta ruta y las condiciones de bienestar en el transcurso de la formación, teniendo en cuenta múltiples factores sociales y barreras institucionales.
Igualmente, en torno al derecho a la salud se establecen apuestas para lograr tránsitos saludables, salud preventiva, atención y programas específicos destinados a resolver problemáticas propias del sector. Por otra parte, se pretende avanzar en el derecho a la vivienda, contemplando programas prioritarios y diferenciales que reconozcan incluso dinámicas de vida comunitaria y/o barreras de crédito económico. Sumado, sobre el derecho al trabajo, se pretende crear cupos, cuotas, programas, mecanismos de acompañamiento, procesos formativos y de promoción que permitan alternativas productivas y ocupacionales reales para esta población que cuenta con muy bajos niveles de formalidad laboral y bajos ingresos económicos producto de la discriminación en el ámbito laboral.
Finalmente, el proyecto también apuesta por una ciudadanía viva para la población trans, por eso orienta acciones para la participación y el derecho a la cultura que les permita ser una ciudadanía en igualdad de oportunidades y con incidencia para el control político y social, así como para su formación y expresión cultural.
Para culminar, hay que señalar que siendo radicado el proyecto de acuerdo, viene una etapa vital en el cabildo distrital, en la que este pasará por sorteo y la designación de ponentes. En ese sentido, esperamos que se respete lo construido por el movimiento social, que sea votado de manera positiva y que cualquier modificación sea para ampliar los derechos contemplados, no para retroceder o limitar. También es menester exigir de la administración distrital su apoyo incondicional para que este sea aprobado y que pase a sanción de la alcaldesa Claudia López. Por tal motivo, es fundamental la vigilancia ciudadana para que no quede engavetado o que los sectores anti derechos se impongan y hundan o cambien la iniciativa. Hay que seguir trabajando conjuntamente para avanzar y asegurar lo construido.
Con el término TRANS se hace referencia a todas las experiencias de vida trans: transgénero, transexual,
travesti, no binario, y las demás identidades de género diversas.
Fuente Cuaro de Hora